Reseña: Mansos de Bob Pop


¡Hola a todo el mundo! 

¿Qué tal estáis? Espero que muy bien. 
 
 El día de hoy os traigo la reseña de mi última lectura: Mansos, de Bob Pop. Ha sido una lectura corta, pero muy intensa en la que acompañamos a nuestro protagonista durante solo una noche, pero... ¡Vaya noche!


Detalles del libro:

  • Editorial : ALFAGUARA; 001 edición (17 junio 2021)
  • Idioma : Español
  • Tapa blanda : 128 páginas
  • ISBN-10 : 8420454761
  • ISBN-13 : 978-8420454764
  • Peso del producto : 243 g
  • Dimensiones : 15.4 x 1.6 x 24 cm

     
Sinopsis:
Mateo no tiene su mejor noche. «¿Cómo soy? Cliente. Joven (treinta y cuatro). Gordo. Guapo. Rico. Homosexual. Alcohólico (ni drogadicto ni un genio, Truman). Inseguro. Paranoico. Nervioso. Risueño. Y educado». Volviendo a casa muy tarde, tras una cena y bastante alcohol, no consigue encontrar taxi y decide parar en una sauna. Descansar un rato, quizá encontrar un poco de compañía, despejarse, no volver a casa solo y desolado. Pero hay días que no acaban nunca, y noches en las que un cliente manso puede verse obligado a cambiar de piel.

Mansos, publicada originalmente en 2010, es la primera novela de un entonces desconocido Roberto Enríquez al que ahora leemos, seguimos y escuchamos como Bob Pop.



 Reseña:

Tengo que comenzar esta reseña confesando que no sabía muy bien qué me iba a encontrar en «Mansos» y lo cierto es que ha sido toda una montaña rusa.
   Como quizá le ha ocurrido a muchas personas, conocí antes a Bob Pop como personalidad televisiva que como escritor y ver esta versión de él, conocer a Roberto Enríquez Higueras, me ha sorprendido muy gratamente.
   Arrancamos esta historia junto a Matías nuestro protagonista, un joven en la treintena que se describe a sí mismo como: cliente, joven (treinta y cuatro años), gordo, guapo, rico, homosexual, alcohólico (ni drogadicto ni un genio), inseguro, paranoico, nervioso, risueño y educado. Rasgos de la personalidad que veremos aflorar durante esta noche en la que lo acompañaremos. ¡Y vaya noche!
   Todo comienza con Matías intentando volver a casa y terminando en una sauna gay de Madrid. A partir de este punto estaremos junto a él y descubriremos la vulnerabilidad de Marías, sus miedos, sus comeduras de cabeza, el cómo llegó a esa sauna por primera vez y sus desventuras entre sus paredes.
   Lo primero que creo que debe destacarse es la facilidad y la capacidad que tiene el autor para seguir el estilo del flujo de conciencia. En otros libros que han caído entre mis manos, siempre podía notarse una sobrecorrección de este tipo de estilo que lo que exige al escritor o escritora es dejarse llevar, fluir con sus pensamientos y que eso hable por él o por su personaje. En el caso de Matías, nuestro protagonista, me ha dejado alucinada la corriente de pensamientos y lo natural que quedan esos saltos de un pensamiento a otro, de un caos a otro.
   Pese a la brevedad del relato (son unas 120 páginas), he sentido mucho peso en cada una de las hojas, una gravedad que me ha revuelto por dentro y que me ha fascinado (y no siempre en el buen sentido, hay que dejarlo claro). La rudeza de ciertas escenas, lo crudo de ellas, el contarlas sin filtro y sin miedo. Es algo en esa narración lo que te hace seguir leyendo, lo que te mantiene con el libro en las manos, porque necesitas saber más de esa sordidez con la que Matías nos cuenta su noche y su vida.
   No sé hasta qué punto esta historia llega a ser autobiográfica, pero es inevitable pensar en ciertos momentos en el autor y en las pinceladas que ha dado durante estos años sobre su vida en entrevistas. Esto solo acentúa aún más el valor de los personajes que nos encontramos en estas líneas y, admitámoslo, crea más morbo para todos aquellos que nos hemos lanzado de lleno a esta historia.

Sin duda se trata de una lectura que no deja indiferente al lector y con un final que, en lo personal, me ha dejado con la boca abierta.


¿Habéis leído ya el libro?  ¡Os leo en comentarios!



0 Comentarios